Un reciente pronunciamiento del Juzgado de Garantías del Joven N°3 de La Plata ordenó a la Fundación José Manuel Estrada garantizar la continuidad escolar de los hijos del arquero de Independiente, Rodrigo Rey, y su pareja, María Laura Cáceres. La resolución hizo lugar al amparo presentado por la familia luego de que el colegio José Manuel Estrada de City Bell rechazara la renovación de la matrícula para el ciclo lectivo 2025, una medida que afectaba especialmente a Benicio, diagnosticado con Trastorno del Espectro Autista (TEA).
Hechos del caso
Una familia interpuso acción de amparo contra un colegio privado de City Bell que decidió no reinscribir a sus dos hijos para el ciclo 2025 -uno de ellos diagnosticado con Trastorno del Espectro Autista (TEA)-. A pesar de múltiples intentos de diálogo y propuestas de inclusión, el colegio alegó conflictos con los padres como motivo de exclusión y no razones vinculadas a los niños.
Los padres manifestaron que, a pesar de haber mantenido numerosas reuniones con autoridades y docentes del Instituto, de haber ofrecido acompañamiento terapéutico externo, colaboración económica para mejorar las condiciones edilicias, y múltiples propuestas concretas para lograr adaptaciones razonables que permitieran la inclusión efectiva de su hijo, la respuesta del Colegio habría sido de marcada reticencia y escasa implementación real.
El fallo
La jueza consideró que la exclusión constituyó una discriminación indirecta y vulneró derechos constitucionales como el acceso a la educación, la igualdad y el interés superior del niño, por lo que ordenó ajustes razonables para garantizar una escolarización inclusiva y respetuosa de las particularidades del menor con discapacidad.
Además, se dispusieron medidas restaurativas, como la capacitación obligatoria en discapacidad para todo el personal del colegio, incluyendo el nivel empresarial, y se exhortó al Ministerio de Educación bonaerense a extender esta formación a todas las escuelas privadas.
La sentencia también absolvió a la Provincia de Buenos Aires, reconociendo su rol mediador en el conflicto y su cumplimiento normativo en materia de inclusión educativa.
Este fallo sienta un precedente relevante en la protección de los derechos de niños con discapacidad y refuerza el deber de las instituciones educativas de garantizar entornos inclusivos.
Rodrigo Rey y su compromiso con la inclusión
El arquero de Independiente se expresó públicamente sobre el caso desde el principio. En agosto pasado, Rey publicó un mensaje contundente al replicar un texto de su pareja: “Esto no se trata de estar de un lado o del otro. Se trata de Derechos Humanos”. Lejos de limitar su posición al ámbito personal, el futbolista ha construido un camino de activismo desde que a Benicio le diagnosticaron TEA en 2022. Él mismo convive con disfluencia, una dificultad en el habla, experiencia que lo llevó a involucrarse aún más en la defensa de los derechos de las personas con discapacidad.
Su compromiso también traspasó las canchas: Rey fue uno de los impulsores del palco sensorial inaugurado en el estadio de Independiente, un espacio adaptado para personas con neurodivergencias, que se sumó a iniciativas similares en River e Instituto.